Hay noches en las que recuerdas por qué haces kilómetros, por qué cargas furgonetas, por qué pasas tantas horas en pruebas de sonido y por qué sigues creyendo en la música en directo.
La de Josh Hoyer & Soul Colossal en la Sala Riviera de Burgos, el 3 de octubre de 2024, fue una de esas noches.

Los norteamericanos Josh Hoyer & Soul Colossal llegan desde Lincoln, Nebraska, con una mezcla explosiva de soul, funk y rhythm & blues: una banda que está en plena forma dentro del circuito de soul actual, con un directo honesto, potente y muy trabajado. Presentan su disco "Green Light", un álbum que ha recibido reconocimientos dentro de la escena blues y soul internacional, y que traen a España en una gira intensa por varias ciudades del país.

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Un jueves de soul en Burgos

La Riviera de Burgos se llenó de ese ambiente especial que solo tienen los conciertos en sala: gente pegada al escenario, miradas cómplices, barras llenas, técnicos ultimando detalles y ese murmullo que sube de volumen justo antes de que se apaguen las luces.

Desde el primer tema, la banda salió a por todas. La voz de Josh Hoyer, grave, cálida y cargada de emoción; la sección de viento empujando cada estribillo; el bajo y la batería construyendo un groove que no te dejaba estar quieto; los teclados y la guitarra dibujando colores alrededor de cada melodía. Un concierto de esos en los que las canciones no solo se escuchan, se sienten.

Green Light, una luz verde para el soul

El repertorio giró alrededor de "Green Light", su último trabajo, un disco que mezcla soul clásico, funk musculoso y R&B con mucho gusto y mucha intención. En directo, esos temas crecen: se alargan, respiran, se transforman en diálogos entre la banda y el público.

Sin artificios innecesarios, todo se apoya en lo esencial: una banda engrasada, canciones sólidas y una conexión real con la gente que tiene delante.
Esa sensación de estar viendo a un grupo que disfruta tanto como el público es la verdadera "luz verde" de la noche.

La Riviera, testigo de otra gran noche

La Sala Riviera se comportó como lo que es: una casa perfecta para este tipo de conciertos. Sonido contundente, cercanía con el escenario, y un público que respondió desde el primer compás.
Aplausos, bailes, caras de felicidad y esa mezcla de sudor y sonrisa que solo se ve cuando las cosas salen bien.

Cuando una banda trabaja así el directo, se nota. Cada cambio de dinámica, cada solo, cada guiño entre músicos suma. Y desde el lado de la producción, es un lujo acompañar una gira así: profesionalidad, respeto por los horarios, comunicación clara y todo al servicio del concierto.

On the Road: crónica de una gira que mereció cada kilómetro

Este concierto en Burgos formó parte de una gira por España que llevó a Josh Hoyer & Soul Colossal por salas y festivales de todo el país, mostrando que el soul y el funk siguen muy vivos cuando se defienden con esta entrega sobre el escenario.

Desde la carretera, ver cómo una ciudad responde así a una propuesta de este tipo es una de las mejores recompensas. No es solo una fecha más: es una noche que se queda en la memoria de la banda, del público y de los que estamos detrás coordinando para que todo funcione.

Gracias

Gracias a la Sala Riviera por el espacio, el trato y el trabajo técnico.
Gracias a Josh Hoyer & Soul Colossal por la música, la actitud y la confianza.
Gracias a todo el equipo implicado en la producción y a cada persona que se acercó a vivir el concierto en directo.

No todos los días se puede disfrutar de una banda así tan cerca de casa.
No todos los días se vive una noche de soul y funk tan redonda.
Por eso, noches como la de Burgos el 3 de octubre de 2024 son las que hacen que esta bitácora On the Road tenga sentido.

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Más sobre esta noche

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